
La Policía de Chile detuvo al presunto líder de la Resistencia Mapuche Lavkenche, vinculado a graves delitos en el sur del país
AMÉRICA LATINA



La Policía de Investigaciones de Chile confirmó este viernes el arresto del presunto líder del grupo radical Resistencia Mapuche Lavkenche, vinculado a graves delitos en el sur del país.


El parte oficial informó que Federico Astete Catrileo fue detenido en el marco de un gran operativo policial, que contó con el apoyo de la Fiscalía y de la Armada de la comuna de Cañete, en el Bío Bío.
El mapuche radical contaba con una orden de aprehensión desde enero de 2024 y estaba prófugo de la Justicia. Entonces había tenido lugar otra mega operación que acabó con la detención de los cabecillas del grupo (Javier Ramírez, Claudia Nahuelan y Elías Cona Tranamil) aunque Astete Catrileo logró escapar.
“Federico Astete es un miembro relevante dentro de la Resistencia Mapuche Lavkenche, una organización criminal que opera desde el año 2020. Él participa en atentados y por eso es requerido”, declaró el subprefecto de la Macrozona Sur, Marcelo Contreras, que sumó que el arresto se produjo en un domicilio “del círculo cercano del imputado”, quien, “en su condición de prófugo, caminaba constantemente su localización”.
Asimismo, el oficial se refirió a su vínculo con el conflicto mapuche que tiene lugar desde hace años en el sur de Chile, donde las comunidades indígenas reclaman la devolución de sus tierras ancestrales a los agricultores y los madereros, y precisó que Astete Catrileo también fue arrestado “por su participación” en un atentado puntual, que data de 2022.
En agosto de aquel año tuvo lugar uno de los incidentes más graves atribuidos al grupo, que implicó un ataque incendiario al Molino Grollmus y terminó que la destrucción total del histórico inmueble y tres heridos -dos de ellos de gravedad y la amputación de una de las piernas del tercero-.
El violento episodio ocurrió en el Bío Bío, donde se ubicaba este Patrimonio Arquitectónico Nacional de más de 106 años, y fue encabezado por un grupo de entre 15 y 20 encapuchados, quienes lanzaron disparos de grueso calibre y destruyeron por completo el lugar. Inclusive, se produjo un intercambio de fuego con los Carabineros.
Esta región forma parte de la denominada Macrozona Sur chilena, que suele ser escenario de ataques incendiarios en el marco de este conflicto indígena. Ante la escalada de violencia, desde 2022 se dispuso el estado de excepción allí, lo que habilita al despliegue de militares para el control de las rutas cercanas.
No obstante estos esfuerzos, los grupos radicales continúan con su accionar, tal como ocurrió el pasado fin de semana, cuando un grupo de cinco encapuchados atacó las instalaciones de un proyecto hidroeléctrico e incendió 52 vehículos.
Enseguida, el Ejecutivo de Gabriel Boric ordenó impartir la Ley Antiterrorista en este caso.
“El atentado en la central Rucalhue en Alto Bío Bío merece toda nuestra condena. Tal como lo hemos hecho en otros casos, perseguiremos y encontraremos a los responsables que deberán responder ante la Justicia. Seguiremos trabajando sin dar pie atrás para erradicar toda forma de violencia”, aseguró el Presidente.
(Con información de AP)
Fuente: Infobae
