Sheinbaum y Petro legitimarán el fraude de Maduro con bombos y platillos

La presidente de México, Claudia Sheinbaum, ha anunciado sin medias tintas que enviará una representación de su Gobierno a la investidura de Nicolás Maduro de Venezuela el 10 de enero. Esta postura de reconocimiento, al parecer, también la ha adoptado su par colombiano, Gustavo Petro, que está sopesando quién representará al país vecino en este acto, por demás írrito. Inicialmente está previsto que sea una delegación de bajo perfil liderada por el embajador en Caracas, Milton Rengifo.

Estos anuncios fueron dados a conocer de manera prácticamente simultánea, cuando resta menos de un mes para la juramentación del próximo presidente de Venezuela —acto al que tanto Edmundo González como Nicolás Maduro piensan asistir— y la tensión se acumula en la región. Sheinbaum dio el primer zarpazo y aprovechó su acostumbrada “mañanera”, en el Palacio Nacional, para ello. Allí comentó lo siguiente:

“En el primer caso va a ir una representación o el propio embajador que está en Venezuela (Leopoldo de Gyves), y en el segundo caso, entiendo que todavía no hay invitaciones, no solo a México, sino que todavía no hay invitaciones en general”.
Las declaraciones tuvieron un efecto inmediato en la región y, como era de esperarse, un guiño del régimen venezolano para devolver este gesto. Pocas horas después, la Asamblea Nacional bajo el control del chavismo, autorizó la designación de Stella Lugo de Montilla como nueva embajadora de la nación caribeña ante México.

El argumento para ello, plagado de adjetivos rimbombantes, fue que “México ha dado muestras de decencia, de valentía, de soberanía e independencia”, razón suficiente para que Maduro solicitara la autorización de esta designación, lo que se interpreta como un gesto de “profundización” de ambos países en “la búsqueda de la solución de los problemas”. 

Este acercamiento iniciado por Sheinbaum echa por tierra toda su perorata sobre mantener una postura “imparcial”, frente a lo que desde los medios se ha denominado como “la crisis postelectoral de Venezuela”, para evitar llamarle fraude a uno de los eventos con mayor número de irregularidades y persecuciones en la historia de la nación caribeña.

Petro y sus inconsistencias que lo dejan en ridículo
El presidente colombiano Gustavo Petro también ha tomado una posición llena de contradicciones, que termina haciéndolo preso de burlas y críticas, por parecer una suerte de veleta, que va de un momento a otro con unas opiniones y luego tiene a los rangos más bajos para hacer el trabajo sucio y realizar anuncios más polémicos, como la participación de una representación diplomática en el acto de juramentación írrita que pretende llevar a cabo el chavismo.

El vicecanciller, Jorge Rojas, dijo en una entrevista con Noticias Caracol que “seguramente el Gobierno de Colombia, como muchos gobiernos de la región, va a enviar a algún representante al acto de posesión del presidente Maduro. En el caso nuestro, inicialmente está previsto que asista el embajador de Colombia en Venezuela, Milton Rengifo”.

Rojas también informó que por ahora iría el embajador y que Petro estaría contemplando la decisión para tomar una determinación final al respecto y recalcó que “está evaluando la situación para saber cuál decisión se toma finalmente”.

Petro, hasta hace pocos momentos se había mantenido en la posición de no reconocer a Maduro hasta que no se publiquen las actas electorales. Sin embargo, este revés discursivo que se da de forma sutil en las declaraciones de Rojas, demuestran que existen planes para dar el visto bueno a la tiranía chavista.

Las autoridades de Colombia han remarcado que no está en la agenda romper relaciones diplomáticas con Venezuela con base en su política de buena vecindad y habían reconocido que todavía estaba por decidir si enviarán a un representante a la toma de posesión prevista en la Asamblea Nacional para el 10 de enero de 2025.

“Colombia tiene una política trazada frente a Venezuela que se basa en la política de buena vecindad, que debemos mantener con todos los países vecinos”, dijo en su momento el viceministro de Asuntos Exteriores, Jorge Rojas, en una entrevista con Blu Radio.

Fuente: PanamPost