¿Quién aconseja a Felipe VI, su todavía esposa, sus consejeros…, o Pedro Sánchez?
Todo lo que tiene Sánchez de pillo, de listo, de taimado, lo tiene el Rey de corto.
¿Ha sido claramente una trampa a la institución monárquica, o un simple intento de parapetarse bajo el paraguas del Jefe del Estado, un jefe del estado que ni está ni se le espera…?
Hace casi una semana que sucedieron los terribles hechos del martes pasado, día 29 de octubre, y después de dejar abandonados a los valencianos por parte del régimen sanchista, al Rey no se le ocurre otra cosa que viajar allí, a hacerse la foto. Y poco más.
¿Acaso esperaba que le recibieran con vítores y aplausos esas pobres personas, que han perdido a familiares directos, a amigos, sus casas, puestos de trabajo, coches, etc.?
No hace falta ser muy inteligente, simplemente normal, no bordeline, para darse cuenta de que no iba a ser así, sino todo lo contrario. Poca me ha parecido la reacción ciudadana contra Sánchez y Mazón, que rápidamente hicieron mutis por el foro, dejando al Rey ante el espejo de sus propias incongruencias y contradicciones.
Dice que ha ido a enterarse de lo sucedido… ¡Debe de ser el único español que no ve las televisiones, lee los diarios o escucha la radio! Por no hablar de los informes secretos del CNI, la Guardia Civil, etc.
¿Cómo se puede tardar seis días en enviar, en serio, al Ejército, a hacer esa labor que la Guardia Civil y la Policía Nacional y las Locales no podían abarcar en su totalidad, ante la falta de medios, tanto personales como de materiales?
Un gobierno inepto, traidor y corrupto, que ha ninguneado la ayuda a la comunidad valenciana, porque allí no mandan los suyos, sino los otros, negándoles todo el apoyo que merecían y merecen. Y al que no le ha importado que haya cientos de muertes, muchas de las cuales se podrían haber evitado, simplemente para hundir al PP en Valencia.
Fuente: PanamPost
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