Cristina evalúa ser candidata en 2025: por qué es una buena noticia para Milei

La elección de medio término, además de reconfigurar el parlamento, sirve para que asome la cabeza el dirigente opositor que va a disputar con el oficialismo los próximos comicios nacionales. Con una oposición sin liderazgo y un Javier Milei en el centro de la escena, Cristina Fernández de Kirchner evalúa ser candidata en 2025 por la provincia de Buenos Aires. Nada más auspicioso para los intereses del presidente argentino.

Como se vio en la marcha de este miércoles, que supuestamente era por el financiamiento universitario pero, según se pudo observar, se trató de una convocatoria política de toda la oposición, en la vereda de enfrente a La Libertad Avanza no hay ningún liderazgo concreto. El exjefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que no se resigna a abandonar la política, tuvo que irse agredido por los sectores kirchneristas y de la izquierda, que se disgustaron fuertemente con su presencia.

Los que convocaron fueron los dirigentes de la Unión Cívica Radical, espacio político que tiene una importancia concreta en la burocracia de la Universidad de Buenos Aires. Sin embargo, el radicalismo no es competitivo en las urnas desde hace muchos años. Mientras que en las provincias debe ir con diversos frentes para mantener gobernaciones e intendencias, la vieja “Lista 3” no está en condiciones de imponerse como fuerza política en ninguna elección.

Que sea Cristina Fernández de Kirchner la figura rutilante de la oposición, como eventual candidata en la provincia de Buenos Aires, es una buena noticia para el gobierno. Es que, más allá del resultado en el orden nacional y en el distrito bonaerense, CFK no es una figura competitiva para ganar las elecciones de 2027. Su imagen negativa supera con creces a la positiva. Los votos propios pueden sobrarle a la hora de conseguir una banca y como para hacer una buena elección en su principal bastión, pero el efecto tapón que le impone a un eventual liderazgo opositor termina beneficiando al oficialismo.

Otra cosa que se pospondría con su posible presencia en el cuarto oscuro es la unidad del peronismo, que no sucederá bajo su liderazgo. Muchos dirigentes justicialistas (con buen tino) saben que el kirchnerismo puede ofrecer mantener estructuras de poder, pero, bajo ningún punto de vista, ninguna posibilidad de retornar a la Casa Rosada.

Un detalle no menor a tener en cuenta (que igualmente no mermará en el caudal de votos del kirchnerismo) serán las noticias coyunturales vinculadas con la justicia en los próximos meses. Cristina tiene una condena en primera instancia, que seguramente será confirmada por casación. Además, la última semana se revocó un sobreseimiento en una de las causas que tenía la expresidente sobre lavado de dinero, por lo que todo parece indicar que sus frentes judiciales serán tema de campaña, si decide presentarse a las elecciones.

Más allá del resultado, de confirmarse que Cristina Kirchner será candidata, hay un par de cuestiones que pueden conocerse de antemano y todas benefician al oficialismo: el peronismo continuará dividido, la oposición no conseguirá en los comicios al candidato competitivo para 2027 y Milei seguirá confrontando con una dirigente con altísimo nivel de rechazo y repudio que tendría serios problemas para ganarle un balotaje al presidente argentino.

Fuente: PanamPost