Agoniza el turismo en Cuba entre el dengue, el chikunguña y los apagones

Cuando se creía que la crisis que padece Cuba —tras más de 60 años de dictadura— no podía empeorar, la realidad demostró que sí es posible. El turismo, una de sus pocas fuentes de ingresos económicos, va en picada ahora que los casos de dengue y chikunguña se salieron de control. A esto hay que sumarle los continuos apagones y la falta de servicios básicos que venían atenuando la visita de turistas extranjeros.

En un solo día se detectaron 1023 nuevos casos, divididos en 627 contagios de chikunguña y 396 de dengue, según Susana Suárez, directora de Salud Ambiental del Minsap. En total, están confirmadas 33 muertes, de las cuales 21 corresponden a menores de edad, por ambas enfermedades. Se desconoce el periodo analizado ya que el régimen castrista reconoció la epidemia el pasado 12 de noviembre, a pesar de que los primeros casos se detectaron en junio de este año. Lo peor es que países que normalmente son fuente de turistas, están alertando de evitar viajes a la isla.

Los “rusos en la isla podrían estar en el epicentro de la epidemia”, menciona el portal turístico Tourdom, haciendo referencia a las cifras oficiales y a unos 14 turistas que «habrían contraído una forma leve de la enfermedad durante sus vacaciones en noviembre». Al mismo tiempo, Guennadi Onishchenko, epidemiólogo de la Academia de Ciencias, pide a los ciudadanos rusos que eviten viajes al extranjero y se limiten a viajar cerca de Moscú, indica el portal Life.ru. Aunque la Embajada de Rusia en La Habana se limitó a una leve alerta, no es descabellado que las declaraciones de medios y expertos estén en lo cierto y que Cuba ya ni siquiera sea atractivo como destino.

Los rusos ya no viajan a Cuba
La caída en el número de visitantes internacionales comprueba el declive del turismo en Cuba, una de las pocas fuentes de acceso a divisas que tienen los cubanos de pie que trabajan dentro de dicha industria. Entre enero y octubre de este año, 1.477.892 personas visitaron la isla. Eso representa 20 % menos en comparación con el mismo período de 2024, según cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).

Parte de ese resultado responde a una caída de 36,2 % de los viajeros rusos ya que se registraron 99.908. En cambio en 2024 la cifra fue de 156.614. Si hacemos referencia a octubre, pisaron el país caribeño 111172 viajeros internacionales en total. Es el peor registro del mismo mes desde el año 2021.

Es decir, el régimen que actualmente dirige Miguel Díaz-Canel no alcanzará su objetivo de 2,6 millones de turistas para este 2025, como había pronosticado. Todo esto no es más que la consecuencia de un país gobernado por el comunismo, que bajo el argumento de la lucha de clases y contra el capitalismo, expulsó a la inversión privada mientras propagó la retórica del «bloqueo estadounidense». En tanto, su cúpula acumula grandes fortunas en la sombras.

Patadas de ahogado del castrismo para atraer inversores
Debido a que el turismo en Cuba también garantiza entrada de divisas al castrismo, no les queda de otra que abrazar al capitalismo alquilando hoteles a cadenas internacionales, como anunció La Habana hace pocos días. Pero los resultados están por verse ya que Vicente de la O Levy, ministro de Energía y Minas, admitió que el año 2026 apenas será «ligeramente mejor» en relación con los apagones, pero que estos seguirán ocurriendo.

En resumen, la situación del turismo en la isla —fuente de recursos para un país aislado del desarrollo, tras años de regímenes comunistas— empeora. En paralelo, la dictadura hace intentos desesperados por ofrecer un entorno «más atractivo» para los inversionistas, simplificando la creación de nuevas zonas especiales de desarrollo o el acceso a la compra de combustibles en divisas y su importación.

Fuente: PanamPost