

China eleva su apuesta frente a EEUU para disputarle el control global de la IA
MUNDO



La Conferencia Mundial de Inteligencia Artificial (WAIC, por sus siglas en inglés) se convierte cada año en la vitrina de China para mostrar sus avances en este campo tecnológico. Aunque empresas occidentales como Tesla, Amazon y Alphabet también dicen presente, la mayor presencia la tienen tecnológicas del gigante asiático en este evento.


Hubo alrededor de 3000 exhibiciones, con el debut de unos 100 nuevos productos entre el 26 y 28 de julio en Shanghái. Entre ellos, robots humanoides fabricados por Keenon Robotics que ofrecieron alimentos a los asistentes, otros destinados a servir de compañía a humanos de Shenzhen, novedosos modelos de IA de Tencent y SenseTime; lentes desarrollados por Alibaba e incluso robots boxeadores. Todos tienen algo en común: los crearon empresas chinas. Y es que desde las filas del Partido Comunista Chino (PCCh) se trazó un plan estatal para ser el líder mundial en IA para 2030.
Los productos de Tesla, compañía propiedad de Elon Musk, también fueron exhibidos en la Conferencia Mundial de Inteligencia Artificial, pero no hicieron presentaciones para los asistentes. Por el contrario, el robot Optimus permaneció tras la vitrina.
Otra novedad llegó de la mano del primer ministro chino, Li Qiang, quien propuso un plan de acción global para gobernar la inteligencia artificial, apenas días después de que el Gobierno de Donald Trump en Estados Unidos lanzara su “Winning the AI Race: America’s AI Action Plan”, para marcar explícitamente el objetivo de competir y superar el control global de Xi Jinping en IA a través de más de 90 acciones federales. En su discurso, Qiang dijo que “los recursos y capacidades clave se concentran en unos pocos países y empresas”. Fue un mensaje directo a la Administración en Washington.
China vs EEUU: la competencia por IA en números
Puede que la competencia por el dominio de la inteligencia artificial no genere tanto ruido a nivel mediático, pero es algo que avanza conforme pasan los meses. Tanto China como Estados Unidos quieren reducir su dependencia del otro. Por un lado, Washington busca limitar el acceso de Pekín a chips avanzados (como los de NVIDIA o TSMC), mientras que el régimen de Xi Jinping impulsa su industria nacional de semiconductores.
En el medio se pactan alianzas como las de Huawei, Biren, SenseTime y Moore Threads y otras empresas sobre las que pesan sanciones estadounidenses. La anunciaron en la WAIC, se llama “Alianza para la Innovación del Ecosistema Modelo-Chip” y según un reporte de Reuters, reúne a desarrolladores chinos de modelos de lenguaje grandes (LLM) y fabricantes de chips de IA. El objetivo es “desarrollar un ecosistema nacional para reducir la dependencia de la tecnología extranjera” además de la presentación de nuevos productos, como “un sistema de computación de IA de Huawei (HWT.UL) que los expertos creen que rivaliza con la oferta más avanzada de Nvidia”.
Los números están reñidos entre ambas potencias por el control global de la IA. Estados Unidos lidera la inversión privada con aproximadamente 471.000 millones de dólares entre los años 2013 y 2024, de acuerdo con datos de Visual Capitalist, seguido por China con 119.000 millones de dólares. Pero el gigante asiático supera las patentes registradas, según el monitoreo de la empresa Digital Science, con 35000 frente a las 2600 de la nación norteamericana. En cuanto a las publicaciones académicas, unas 24000 son chinas en comparación con las 19000 difundidas por expertos en Europa, EE. UU. y Reino Unido.
Fuente: PanamPost


