
Detrás de la llamada entre Trump y Putin: las diferencias que podrían “eternizar la guerra”
MUNDO



Dos horas duró la llamada entre Donald Trump, presidente de Estados Unidos, con Vladímir Putin, su homólogo ruso. Esta conversación podría definir el futuro de la invasión contra Ucrania, iniciada en el año 2022. Pero aún quedan detalles por definir y más aún, conocer cuánto están dispuestas a ceder las respectivas partes en medio de este conflicto que se ha cobrado más 45000 víctimas civiles, según el defensor del Pueblo de Ucrania, Dmitró Lubinets.


Trump aseguró luego de la llamada con Putin que Rusia y Ucrania “comenzarán de inmediato negociaciones hacia un alto al fuego y, más importante aún, hacia el fin de la guerra”. Su tono fue optimista. Agregó que “las condiciones para ello serán negociadas entre ambas partes, como debe ser, ya que ellos conocen los detalles de una negociación que nadie más sabría”. Acto seguido, mencionó las intenciones de Moscú para “realizar un gran comercio con Estados Unidos cuando termine esta catastrófica ‘carnicería'”.
Pero las palabras de Putin a la prensa contrastan con las de su homólogo. Si bien mencionó que Rusia “está dispuesta, a trabajar con la parte ucraniana en un memorándum sobre un posible y futuro tratado de paz”, también dijo que el memorándum que elaborará con el gobierno de Zelenski incluirá “determinadas posturas sobre los principios de arreglo y los plazos para la firma de un posible tratado de paz”. Desde ya, expertos en la materia advierten el peligro: que continúe dilatándose el fin de la guerra.
La estrategia de Putin para ganar tiempo
Las pistas no solo están en las declaraciones de Putin, quien explicó que “los contactos entre los participantes en las negociaciones de Estambul se reanudaron y esto nos permite suponer que, en general, estamos en el buen camino”. Se sabe que el mandatario ruso impone condiciones que Volodímir Zelenski no está dispuesto a aceptar. Por ejemplo, la retirada total de las tropas ucranianas de las regiones de Donetsk, Jersón, Lugansk y Zaporiyia, así como de Crimea, anexionada por Rusia en 2014 y que Ucrania considera suyas.
Además, Moscú exige la desmilitarización de Ucrania al punto de que no represente una amenaza frente al ejército ruso o que abandone formalmente su intención de unirse a la OTAN. No conforme con eso, Putin pide el levantamiento de sanciones occidentales impuestas a partir del inicio de la invasión en 2022. Aunque Trump asegura en su más reciente mensaje que informó los resultados de la llamada al mandatario ucraniano y a otros líderes mundiales, el escepticismo abunda sobre la verdadera postura de ambos mandatarios.
La conclusión para Nacho Montes de Oca, periodista y escritor, resulta evidente: “No hubo acuerdo concreto y Rusia sigue ganando tiempo mientras juega con la paciencia de EE. UU.”. Y es que la cautela de las palabras de Vladímir Putin —sin confirmar que las nuevas conversaciones den paso al fin de la guerra— también abre la puerta a una negociación permanente. Algo de lo que Trump también podría ser consciente. “Una negociación eterna le permite [a Trump] aplacar a Europa, no armar a Ucrania, relajar las sanciones a Rusia e incursionar en sus recursos naturales con la excusa de un proceso de paz en curso”, escribió el experto en X, quien ha declarado anteriormente a PanAm Post.
Ucrania sufre el mayor ataque ruso con drones
De todas formas, algo es seguro: la tregua no es viable para el presidente ruso. Lo demuestra por las exigentes condiciones que impone a Ucrania y porque el pasado “Día de la Victoria” para conmemorar los 80 años de la derrota nazi a manos de la Unión Soviética, anunció un cese al fuego que nunca ocurrió. El Estado Mayor ucraniano reveló que se produjeron 80 combates en ocho zonas del frente durante el segundo día de “tregua”.
Un evento similar ocurrió un día antes de que Trump y Putin tuvieran esta conversación telefónica de dos horas: el ejercito ruso lanzó “el mayor ataque con drones desde que se inició la guerra”, según fuentes oficiales de ucrania. En total, envió 273 proyectiles contra Kiev y otras ciudades. Una mujer de 28 años murió y otras tres personas, incluido un niño de cuatro años, resultaron heridas.
Fuente: PanamPost
