


Claves y enigmas del acuerdo de aranceles entre Estados Unidos y la Unión Europea
MUNDO Fernando Salinas*


El tuétano del hueso duro de roer que son los aranceles de Donald Trump, lograron destriparlo y Úrsula von der Leyen digerirlo, en nombre de la Unión Europea. Pero lo que ambos acordaron en Escocia, al menos de momento, es prácticamente un borrador con un compromiso de cumplimiento y un abanico de porcentajes donde hubo consenso. Ahora, como en las leyes, falta su desarrollo, el reglamento y que sea vinculante.


El punto clave es el acuerdo de un gravamen general del 15 % a productos europeos que ha permitido evitar una guerra comercial entre los dos gigantes a partir del 1 de agosto. Esa fecha límite, de superarla, suponía aplicar tasas del 30 % a Europa por no llegar a un consenso.
Von der Leyen explicó que el 15 % se aplica a la mayoría de los sectores, incluido el automovilístico, los semiconductores y el farmacéutico, pero no a todos.
«Este 15 % es un tope claro. Sin acumulación (de más tasas), todo incluido, así que proporciona una claridad muy necesaria para nuestros ciudadanos y empresas. Esto es absolutamente crucial», explicó, como recoge Efe.
A partir del viernes 1 de agosto
El arancel del 15 % entrará en vigor el próximo viernes y cubrirá alrededor del 70 % del comercio que la UE mantiene con Estados Unidos.
El otro 30 % incluye sectores como el farmacéutico y el de los semiconductores, cuyos productos por ahora no tienen aranceles, pero que están pendientes del resultado de una investigación puesta en marcha por el Gobierno estadounidense.
Estará reflejado en un documento
Fuentes comunitarias advirtieron que si finalmente Washington aplica aranceles a esos u otros sectores adicionales, el gravamen para la UE no puede superar el 15 %.
También indicaron que a muy corto plazo se espera la publicación de una declaración conjunta entre Estados Unidos y la Unión Europea, un documento legalmente no vinculante, que refleje los detalles del acuerdo.
Las fuentes manifestaron que se seguirá trabajando al menos hasta el 1 de agosto para tener ese documento listo y que desde la UE desean que se publique tan pronto como sea posible.
Arancel cero a productos «estratégicos»
Von der Leyen también indicó que Estados Unidos y la UE han acordado imponer aranceles cero de manera recíproca a «una serie de productos estratégicos».
«Esto incluye todas las aeronaves y sus componentes, ciertos productos químicos, ciertos genéricos, equipos semiconductores, ciertos productos agrícolas, recursos naturales y materias primas críticas. Seguiremos trabajando para añadir más productos a esta lista», señaló.
Entre los productos agrícolas que quedarían con un arancel cero, fuentes comunitarias mencionaron este lunes los frutos secos, langostas, pescados procesados y crudos, quesos, otros productos lácteos y alimentos para mascotas.
¿Qué pasa con el acero y el aluminio?
Antes del acuerdo que Bruselas y Washington cerraron el domingo, el acero y aluminio de la UE que llegaba a Estados Unidos estaba sujeto a un arancel del 50 %, pero los dos bloques han pactado un mecanismo cuyos detalles aún se tienen que fijar.
«En materia de acero y aluminio, la UE y Estados Unidos se enfrentan al desafío externo común de la sobrecapacidad global. Trabajaremos juntos para garantizar una competencia global justa. Para reducir las barreras entre nosotros, se recortarán los aranceles y se establecerá un sistema de cuotas», remarcó la presidenta de la CE.
Los flecos
Fuentes comunitarias indicaron a Efe que todavía se tienen que negociar los detalles relativos a ese punto, si bien explicaron que la idea es que las importaciones de acero cubiertas por la cuota tengan el arancel de la nación más favorecida y que superado ese nivel se aplique un gravamen del 50 %.
Las fuentes insistieron en que como se tienen que negociar los detalles, este sistema no comenzará a aplicarse el 1 de agosto, a diferencia del arancel general del 15 %, que sí está previsto empezar a implementar el primer día del próximo mes.
IA, inversiones y energía
En virtud del acuerdo, la UE se compromete también a comprar energía estadounidense (gas, petróleo y nuclear) por valor de 750.000 millones de dólares durante el mandato del presidente estadounidense, Donald Trump, que concluye en enero de 2029.
Para ello serán necesarias «ciertas inversiones en infraestructuras», pero se mostraron confiados en que se pueda lograr lo pactado.
Compra de armamento
En cualquier caso, subrayaron que no será la propia Unión Europea la que compre la energía, sino que las adquisiciones las tendrán que realizar las empresas privadas.
Por otro lado, las fuentes también dijeron que en el acuerdo arancelario con Estados Unidos no se han introducido cifras sobre adquisición de armas.
Von der Leyen sí mencionó en Escocia que los chips de inteligencia artificial estadounidenses ayudarán a impulsar las gigafactorías de IA de la Unión Europea y ayudarán a Washington a mantener su ventaja tecnológica. Estados Unidos es el «socio preferido» de la UE para adquirirlos.
La UE también se ha comprometido a que se realicen inversiones privadas en la economía estadounidense por valor de 600.000 millones de dólares.
*Para El Debate



