



Las fuerzas rusas recuperaron tres localidades al norte y oeste de la ciudad de Sudzha en la región rusa de Kursk, parcialmente ocupada por el Ejército ucraniano desde agosto del año pasado, mientras que al menos 14 personas murieron en bombardeos en distintos puntos de Ucrania.


El Ministerio de Defensa ruso precisó en un comunicado que las localidades recuperadas son Víktorovka, Nikoláevka y Stáraya Soróchina en la región de Kursk", indicó en Telegram el mando militar ruso. En los últimos días, los medios rusos informaron que, en sus avances, las fuerzas rusas buscan cortar las vías de abastecimiento ucranianas en Sudzha, la ciudad más importante controlada por las tropas de Kiev en territorio ruso, y cercar las fuerzas enemigas. Hasta ahora, lograron recuperar alrededor del 60 por ciento de las ciudades tomadas por Ucrania, informó la agencia de noticias EFE.
Rusia continúa su ofensiva Kursk sin poner fecha a su posible total recuperación, aunque ha negado que cambiará este territorio por territorios ucranianos ocupados por las fuerzas rusas. "Las unidades ucranianas serán expulsadas de este territorio, todos. Aquellos que no sean expulsados, serán liquidados", aseguró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Al menos 14 muertos en Ucrania
Respecto a las 14 muertes en bombardeos rusos en Ucrania, 11 perdieron la vida y otras 30 resultaron heridas en el centro de la ciudad Dopbropilia, en la región ucraniana de Donetsk, según informaron el Servicio Estatal de Situaciones de Emergencia y la Policía Nacional ucranianas. "Ocho edificios de cinco plantas, un edificio administrativo y 30 vehiculos resultaron dañados", indicó en su cuenta de Telegram.
El servicio estatal también reportó incendios en varios edificios y que durante las tareas de extinción, las fuerzas rusas volvieron a atacar con drones y dañaron un camión de bomberos. "A pesar de la amenaza, los equipos de rescate siguieron trabajando. El fuego se contuvo en 20 departamentos, y se extinguieron tres incendios con una superficie total de 190 metros cuadrados", detalló, mientras que la Policía Nacional informó en otro comunicado que entre los heridos hay al menos cinco niños.
Tras el ataque, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, acusó a Moscú de no querer poner fin a la guerra. "Rusia está demostrando literalmente cada día con su crueldad que nada ha cambiado para ellos. No piensan en cómo poner fin a la guerra, sino en cómo lograr destruir y capturar más, mientras el mundo les permita librar este conflicto bélico", denunció el mandatario en su cuenta de Telegram. "Es importante que sigamos coordinando todos nuestros esfuerzos con nuestros socios para garantizar que nuestra defensa funciona eficazmente y que se hace todo lo posible para acercar la paz", agregó.
La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Kaja Kallas, también condenó el ataque y reiteró que la UE debe aumentar su apoyo militar a Kiev para evitar más civiles muertos. "Los misiles rusos siguen cayendo sin descanso sobre Ucrania, trayendo más muerte y más destrucción. Una vez más, (el presidente ruso, Vladimir) Putin muestra que no tiene interés en la paz", escribió Kallas en sus redes sociales
Los bombardeos rusos con drones también mataron a tres personas, y otras siete resultaron heridas en una planta procesadora de carne en Bojodujiv, en la región nororiental ucraniana de Járkov. "Como resultado del impacto de cuatro aviones no tripulados en el territorio de la planta procesadora de carne se declaró un incendio y se dañaron talleres de producción, garajes. Murieron tres civiles y otras siete personas resultaron heridas", informó el jefe de la administración militar de Járkov, Oleg Sinegubov, en un comunicado. En otro mensaje, mencionó el hallazgo de uno de los cuerpos de las víctimas, que estaba carbonizado debajo de los escombros y que fue retirado por las autoridades para realizarle un examen forense.
El ejército ucraniano precisó en un comunicado que las fuerzas rusas llevaron a cabo sus ataques con dos misiles balísticos Iskander-M/KN-23 y un misil de crucero Iskander-K, así como con 145 drones de ataque. "Confirmamos el derribo de un misil de crucero Iskander-K y 79 vehículos aéreos no tripulados de ataque Shahed y otros tipos de drones en las regiones de Járkov, Poltava, Sumi, Cherníguiv, Cherkasi, Kiev, Kirovograd, Dnipropetrovsk, Zaporiyia, Donetsk, Mikoláyiv y Odesa", indicó la Fuerza Aérea ucraniana, además de decir que otros 54 drones desaparecieron de los radares sin consecuencias negativas.
Rusia repele ataques ucranianos
Ucrania también atacó con drones el territorio ruso, pero no ocasionó muertes de civiles al ser repelido. "Fue repelido un ataque de drones en la refinería del distrito Kirishski. Las defensas antiaéreas derribaron un dron cuando se aproximaba a la empresa, el otro fue derribado sobre ella. Uno de los tanques sufrió daños externos por la caída de los fragmentos", señaló en Telegram el gobernador de la región de Leningrado, Alexandr Drozdenko.
El Ministerio de Defensa de Rusia informó además que las defensas antiaéreas derribaron en la noche del viernes 31 drones ucranianos. La mayor parte de los dispositivos, un total de 26, fueron derribados sobre la sureña región de Krasnodar, el resto en las regiones de Briansk, Leningrado y Yaroslavl, detalló la cartera en un comunicado. Posteriormente, el gobernador de la región fronteriza de Bélgorod, Viacheslav Gladkov, denunció que en la localidad de Jotmízhsk del distrito de Graivoron dos casas y un auto sufrieron daños por un ataque con dron.
Fuente: Página12



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