Carrera presidencial en Colombia: renacer del centro e izquierda sin Pacto Histórico

AMÉRICA LATINAAgencia 24 NoticiasAgencia 24 Noticias
ELECCIONES-COLOMBIA

Aunque Gustavo Petro ha lanzando globos de ensayo para medir el respaldo a su proyecto del “cambio” con miras a mantener el control de la Casa de Nariño, el escaso músculo político y la alta desaprobación a su gestión obligan al oficialismo a recalcular sus próximos pasos de cara a las presidenciales de 2026 en Colombia. Ni la propuesta de convocar a una constituyente ni la pretensión de buscar la reelección consiguen apoyos suficientes como para avanzar en esa dirección. Por tal motivo, la izquierda busca reorganizarse para presentarse en los próximos comicios con una nueva imagen que luzca fresca y alejada de los escándalos y desaciertos del actual gobierno, mientras los partidos de centro y derecha hacen lo propio por su lado con una larga lista de nombres que ya aparecen en las encuestas para disputarse la candidatura de sus respectivas coaliciones.

El propio Petro ha asomado la posibilidad de crear un “frente amplio” que incluya a todos los partidos de izquierda para las próximas elección y ahora surge otra iniciativa que parece ir en esa línea, dejando atrás lo que fue el Pacto Histórico que llevó al exguerrillero al poder en 2022. Se trata de una nueva coalición propuesta por el partido Fuerza Ciudadana, que a pesar de ser una organización política de escasa representación nacional que nació en la región Caribe, dio un paso adelante al plantear la conformación de un “Frente Unido del Pueblo” para “hacer frente de manera organizada a la extrema derecha y su propósito de desestabilizar al actual gobierno y unificarse para ganar las elecciones de 2026”, según se lee en un documento divulgado el fin de semana.

Un manifiesto marxista más allá del Pacto Histórico
 
Los promotores, entre los que destaca el exgobernador del departamento de Magdalena y excandidato presidencial Carlos Caicedo, invitan a sumarse a esta nueva alianza a “los partidos y movimientos políticos progresistas y de izquierda nacionales y territoriales”, así como a una larga lista de sindicatos, movimientos feministas, pueblos ancestrales y colectivos LGBT, con el compromiso de llegar a un acuerdo en torno a cinco principios, entre los que resalta el impulso de “la transformación mediante un proceso constituyente y de adopción de una nueva constitución” para instaurar un nuevo régimen político de “democracia plena y participativa del pueblo”, tal como propuso Hugo Chávez en Venezuela hace poco más de dos décadas.

Genera particular preocupación el hecho de que se plantea “el sufragio universal en todos los poderes”, incluyendo además del Ejecutivo y Legislativo (como corresponde en una democracia) al Poder Judicial y las Fuerzas Armadas, lo que se asemeja a la polémica reforma judicial recién aprobada en México, que establece la elección popular de jueces y magistrados de la Suprema Corte, poniendo en peligro la separación y el contrapeso de los poderes del Estado.

Los otros cuatro puntos de la propuesta no son menos preocupantes. En lo económico plantean avanzar hacia un “decrecimiento del modelo capitalista” en busca de la utópica y desastrosa “distribución de la riqueza”. En lo social proponen “lograr una efectiva igualdad, superando una concepción racista, heteropatriarcal y edadista”. No podían faltar el “antifascismo” y la “autodeterminación y no injerencia” en lo que tiene que ver con materia internacional. Y por último, una “transformación del Estado y organización del territorio” para superar la “desigualdad, el abandono y la inequidad territorial”.

Colombia más cerca del centro que de la izquierda
 
Frente a este manifiesto abiertamente marxista genera alivio que en la última encuesta, elaborada por el Centro Nacional de Consultoría, los posibles aspirantes de la extrema izquierda petrista aparecen como las opciones con menor respaldo, siendo la senadora del Pacto Histórico, María José Pizarro, quien hasta el momento lidera la preferencia para quedarse con la candidatura de la coalición que llevó a Petro a la Presidencia, pero con un lejano 5,4 %. Por debajo de ella se encuentran compitiendo dentro del mismo espacio político Gustavo Bolívar con 4,3 %, la vicepresidente Francia Márquez con 3 %, el canciller Luis Gilberto Murillo con 2,2 %, el exalcalde de Medellín Daniel Quintero con 1,7 % y la ministra de Ambiente Susana Muhamad con apenas 1 %.

Destaca en esta encuesta para medir la intención de voto de cara a las presidenciales de 2026 en Colombia un aparente renacer del centro. El líder del partido Nuevo Liberalismo, Juan Manuel Galán, es quien aparece a la cabeza en la preferencia de los encuestados con 10,7 %, seguido por la exalcaldesa de Bogotá, la centroizquierdista Claudia López, con 8,6 %; y en tercero y cuarto lugar se ubican los excandidatos a la Presidencia Sergio Fajardo y Germán Vargas Lleras con 8,2 % y 8,1 %, respectivamente, ubicándose el primero en un espacio político de centro con inclinación a la centroizquierda y el segundo más cercano a la centroderecha.

Y en el medio de las preferencias se ubican los posibles aspirantes a la candidatura presidencial por la coalición de derecha, tradicionalmente vinculada con el uribismo, destacando la periodista y directora de la revista Semana Vicky Dávila con 7,5 %. Y la siguen los senadores del Centro Democrático Miguel Uribe y María Fernanda Cabal con 6,7 % y 4,5 %, respectivamente.

Fuente: PanamPost

Últimas noticias
Te puede interesar
Lo más visto