Annette Falcón, líder reunificacionista de Puerto Rico: «Nos gustaría volver a ser españoles para trabajar por el futuro de España»
MUNDO José María Ballester Esquivias*Es originaria de Mayagüez, Puerto Rico, madre de tres hijos que andan por sus treinta y cuarenta y maestra de español en Laramie, Wyoming. Su bisabuelo de parte de padre era español, así como su bisabuela. Por parte materna, es de origen canario y andaluz. Abrazó la causa reunificacionista a raíz de su larga estancia en Estados Unidos. «En los casi 30 años que llevó enseñando allí, siempre tuve un problema con los libros de español: siempre ponían a España en el séptimo capítulo. A veces los profesores no llegan ni a eso. No me parecía bien, pues cuando yo me crie en Puerto Rico, se empezaba por España».
En Estados Unidos, se empezaba por otro país hispano, «pero no se le daba a España la importancia que se le debe de dar. El hecho de defender que se empezase por España me dio conciencia de que soy española, además de puertorriqueña. Pero vengo de españoles, por lo que tengo que defender a España. Siempre pensé que Puerto Rico tenía que ser parte de España». Hasta que un día vio en Youtube un programa de reunificacionistas. «Me dije entonces a mí misma: Esto soy yo y es en lo que siempre he creído».
—Detengámonos un momento en la cita más próxima. ¿Cuál es el índice de apoyo a su causa en Puerto Rico de cara al plebiscito del 5 de noviembre?
—Ahora mismo hay un bloqueo mediático para el movimiento reunificacionista. A veces se le menciona, pero no va a estar en la papeleta del plebiscito porque nos han tenido tapados hasta la fecha. Desafortunadamente, no hemos podido hablar con el pueblo puertorriqueño para poder educarlo en cuanto al movimiento reunificacionista. Ya que no será ahora en noviembre, esperemos que en los próximos cuatro años haya un referéndum y exista un partido político que defienda la causa.
—¿Les impiden las autoridades puertorriqueñas hacer campaña?
—No solo nos lo impiden, también impiden que hablemos en programas políticos y de otros eventos que conciernen a Puerto Rico y a su estatus. Ahora, algunos de los políticos nos mencionan. Hasta la fecha no hemos tenido la posibilidad de hacer ninguna campaña, ni de avisar a la mayoría de los puertorriqueños.
—Se supone que en Puerto Rico hay libertad de expresión. ¿O no es así?
—Claro que se supone: en Puerto Rico hay libertad de expresión. Pero del dicho al hecho, hay un largo trecho. Nadie nos impide hablar. El problema es llegar a las masas. Porque tanto la radio como la televisión nos impiden llegar a la gente. Cuando se nos menciona, es en modo ridículo y de mofa. Hasta que no tengamos una plataforma que nos permita comunicar en masa, nuestra trayectoria será difícil.
—Vayamos al fondo del asunto: ¿Cuáles son los argumentos a favor de la reunificación de Puerto Rico con España?
—Antes que nada, hay que ver que después de 126 años de presencia norteamericana en Puerto Rico, se nos ha dado siempre la idea de que los gloriosos Estados Unidos, de que si la primera potencia del mundo y dale que es tarde. No obstante, las personas que van a Puerto Rico pueden ver cómo está. En materia de infraestructuras, tenemos cosas que aún son de 1898, cuando se fue España.
Después, nos han querido quitar la lengua, sabiendo que hemos hablado en español por 400 años antes de que llegaran los estadounidenses. Teníamos nuestros bancos, la situación económica era buena. Nos acostamos españoles y nos levantamos estadounidenses, aunque no tuvimos la ciudadanía hasta 1917. Con todo eso, se supone que Puerto Rico estuviera en mejores manos. Y no lo está.
Tampoco hay que olvidar el modo en que se nos quitó nuestra ciudadanía española: es uno de los puntos con los que los reunificacionistas no estamos de acuerdo. Tenemos una herencia y queremos regresar a ella.
—Eso es legítima añoranza del pasado. Pero, ¿en qué medida España es para ustedes una opción de futuro?
—Podemos ver desde acá que en España hay muchos problemas que han de arreglarse. Como puertorriqueños, nos gustaría volver a ser españoles para volver a trabajar en conjunto para el futuro de España. Queremos pelear por España como españoles.
—¿Podría especificar un poco más?
—Estamos buscando la reunificación con España y eso tiene muchos caminos. Algunos dicen que se podría parecer a algo como lo que tienen las Canarias por ser ultramarino. Los reunificacionistas no tenemos nada concreto porque cada español, independientemente de donde sea, va a ver la política y el futuro de un modo diferente. Entonces, lo que nos queda a nosotros es unirnos nuevamente a España. Una vez seamos españoles, lucharemos por lo que le convenga a España.
—¿Es usted consciente de que en España abundan los problemas?
—Por eso digo que no tenemos nada definitivo para poder decir cómo para poder decir va a ser así o va a ser asá. Pero estaremos junto a nuestros hermanos peninsulares en lo que se tenga que afrontar. También hay problemas en Estados Unidos, pero nuestros hermanos peninsulares creen que como estamos con ese país, las cosas están mejor. No lo están. Problemas hay en la Madre Patria y problemas hay en los Estados Unidos. Eso incluye a Puerto Rico.
—¿Por qué España resolvería mejor que Estados Unidos los problemas de Puerto Rico?
—Nadie está diciendo que España va a resolver mejor que Estados Unidos los problemas de Puerto Rico. Lo que estamos diciendo es que vamos a volver a casa, viendo el porvenir de Puerto Rico como lo que siempre hemos sido desde 1493. ¿Resolver? No se han resuelto los problemas en España tan siquiera.
—Uno de los mayores problemas de España es la tensión territorial. ¿Está a favor de la unidad de España?
—Estamos a favor de la unidad de España porque queremos ser parte de ella. En Puerto Rico, que es muy pequeño, me crie con andaluces, con vascos, con madrileños. Nosotros no vemos esa diferencia como la ven ustedes en la Península. En Puerto Rico, al estar todos juntos, nos vemos como hermanos. Es ahora cuando sabemos que hay esas diferencias en España, pero no queremos eso para España.
—¿Acepta la Monarquía parlamentaria como forma de Estado?
—Cuando me crie, teníamos los retratos de Isabel y Fernando en el aula y nos decían que éramos súbditos de los Reyes Católicos, aunque hubieran muerto hace siglos. Pero son la representación que yo he tenido como puertorriqueña y española. Y es por parte de la Monarquía de los Reyes Católicos que yo me identifico como española. Esté España con Monarquía o sin ella, soy española de cualquier modo. Si hay Monarquía, le seré fiel y si no la hay, pues seguiré siendo fiel.
*Para El Debate