Donald Trump vs. Kamala Harris: cinco claves que definirán el futuro de Estados Unidos

Esta noche, la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump debatirán en un evento crucial en Filadelfia, que podría ser decisivo para las elecciones del 5 de noviembre. El debate, que se llevará a cabo en un momento crítico de la campaña y con las encuestas mostrando un escenario muy ajustado, comenzará a las 21:00 hora local y se celebrará en la ciudad de Filadelfia, estado clave de Pensilvania.

Organizado por la cadena ABC, este podría ser el único encuentro directo entre Donald Trump y Kamala Harris, quienes se encontrarán formalmente por primera vez esta noche, ya que nunca antes habían tenido una conversación.

La oratoria de Harris como fiscal
En cada uno de los debates a lo largo de su carrera, Harris se ha destacado por adoptar una estrategia combativa pero mesurada, parecida a la que emplearía un fiscal frente a un jurado. Durante su campaña, ha sabido aprovechar su bagaje como fiscal para establecer un contraste con Donald Trump, quien se distingue por ser el primer presidente estadounidense condenado por delitos mayores.

Harris también ha mostrado su habilidad para generar respuestas que se convierten en fenómenos virales en las redes sociales.

En uno de los debates de las primarias demócratas de 2020, incluso el presidente de EE.UU., Joe Biden, experimentó esta destreza cuando Harris lo confrontó severamente por sus posturas anteriores sobre el racismo, y lo hizo comparando estas con su propia experiencia como una de las primeras niñas afroamericanas en asistir a una escuela desegregada.

La imprevisibilidad y caos de Trump
Por otro lado, la principal fortaleza de Donald Trump radica en su habilidad para descolocar a sus oponentes, desafiando las normas convencionales de la política. Es conocido por sus ataques impredecibles, el uso de apodos peyorativos, mentiras y teorías conspirativas, eligiendo siempre la táctica que considera más efectiva en el momento.

Jason Miller, asesor del ex presidente, ha equiparado a Trump con boxeadores destacados como Floyd Mayweather o Muhammad Ali, argumentando que es imposible para Harris prepararse adecuadamente para un debate donde los ataques pueden provenir de cualquier dirección.

Además, Trump posee una vasta experiencia en televisión, mucho mayor que Harris, habiendo sido el protagonista de programas de telerrealidad como 'The Apprentice'. Este debate marca su séptima participación en debates electorales generales desde 2016, demostrando en cada uno su capacidad para transformar cualquier evento en un espectáculo centrado en él.

Micrófonos silenciados
A favor de Trump podría jugar una de las reglas más controvertidas del debate: los micrófonos se silenciarán al final de cada intervención para permitir que el otro candidato responda sin interrupciones.

Esta norma fue propuesta por la campaña demócrata cuando Biden era el candidato, pero el equipo de Harris hubiera preferido que los micrófonos estuvieran activos en todo momento para mostrar a Trump como un candidato incapaz de controlarse, interrumpiendo sin cesar y sin la templanza necesaria para regresar a la Casa Blanca.

Aborto vs. Inmigración
En cuanto a los temas del debate, ambos candidatos lucharán para que el asunto que más les beneficia sea el predominante.

Donald Trump atacará a Harris por su papel como la "zarina de la frontera" en la Administración Biden, refiriéndose a su responsabilidad de abordar las causas de la migración desde Centroamérica hacia EE.UU., aunque nunca tuvo a su cargo la gestión directa de la frontera.

Harris, por su parte, recordará a los votantes que fue Trump quien nombró a los tres jueces del Tribunal Supremo que derogaron el fallo 'Roe vs. Wade', que durante medio siglo protegió el derecho federal al aborto.

Votantes indecisos
El debate tendrá como audiencia principal a un puñado de votantes indecisos que podrían decidir las elecciones en siete estados clave: Pensilvania, Wisconsin, Míchigan, Carolina del Norte, Georgia, Arizona y Nevada.

A todos esos votantes, les une una preocupación principal: la economía. Por eso, tanto Trump como Harris han presentado propuestas con medidas populistas para atraerlos, como la exención de impuestos sobre las propinas. 

CON INFORMACION DE MDZOL.COM