Cómo los demócratas intensificaron su cacería de brujas contra Trump

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Jack Smith, fiscal especial para el Departamento de Justicia de los Estados Unidos vinculado al Partido Demócrata, insiste en revivir acusaciones judiciales contra el actual candidato republicano Donald Trump a menos de tres meses de las elecciones. Esta vez, se enfoca en los cuatro casos de supuesta interferencia electoral y responsabilidad en el ataque contra el Capitolio en enero de 2021.

Smith presentó una nueva acta al Tribunal de Distrito del distrito de Columbia. Allí redujo de 45 a 36 la cantidad de hojas. Además, elimina alegaciones que el Tribunal Supremo calificó como erróneas. Otro cambio, fue el enfoque que ahora se centra en el papel de Trump como candidato que buscaba la reelección, y no como presidente en ese momento. Es una vuelta de tuerca que desde ya el abanderado republicano califica de “ridícula”.

Y es que Trump podría tener razón. Smith busca dar la vuelta a este entramado judicial porque en julio el Tribunal Supremo le concedió al abanderado republicano inmunidad parcial por acciones que estaban dentro de sus poderes constitucionales como mandatario.

Así Smith esquiva al Tribunal Supremo
Esta nueva acusación del caso contra Trump llega justo antes de que cierre una ventana del período electoral para la presentación de cargos, explica The Washington Post. La razón es que en unos diez días entrará en vigor “una política del Departamento de Justicia conocida como ´la regla de los 60 días´, que impide cualquier nueva presentación de cargos contra el expresidente”.

Eso explica la movida del fiscal, cuya familia tiene estrechos lazos con el bando demócrata, como su esposa dirigiendo un documental para Michelle Obama o su suegra trabajando para la fundación de Soros. Lo que Smith dice al tribunal es que ahora la acusación fue presentada “por un nuevo gran jurado que no había escuchado previamente pruebas en este caso”.

Respecto a la reducción de cantidad de hojas, se debe a que el equipo de Smith eliminó acusaciones del supuesto intento del expresidente de hacer que el Departamento de Justicia “respaldara sus falsas afirmaciones de un posible fraude electoral”. Eso les permite esquivar el dictamen que el Tribunal Supremo hizo en julio respecto a que las interacciones entre un presidente y su Departamento de Justicia se consideran “un acto presidencial oficial que está exento de procesamiento”.

Trump respondió al fiscal
No es para menos que el candidato republicano a la presidencia califique de “ridícula” esta acusación de Jack Smith a medida que se acercan las presidenciales. “Esto es simplemente un intento de INTERFERIR CON LAS ELECCIONES y de distraer al pueblo estadounidense de las catástrofes que Kamala Harris ha infligido a nuestra nación, como la invasión fronteriza, el crimen inmigrante, la inflación desenfrenada, la amenaza de una Tercera Guerra Mundial y más…”, escribió en Truth Social.

Así, remarcó lo “sorprendente” que es esta nueva movida judicial, a pesar del fallo del Tribunal Supremo. “Es un abuso sin precedentes del criminal sistema judicial”, aseveró.

Fuente: PanamPost

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