¿El socialismo puede competir “de igual a igual” en el campo de las ideas?

Es innegable que, en su momento, las ideas socialistas tuvieron su auge en occidente. Dicen que Lenin incluso tenía un nombre para las personas que defendían el modelo de la planificación centralizada en las democracias liberales. Los famosos “idiotas útiles” que erosionaban un sistema de libertad, mientras que proponían un sistema liberticida, al que interpretaban desde las fantasías más utópicas.

Durante el “apogeo” soviético (para la dictadura gobernante, ya que para la gente no había nada bueno), los socialistas hicieron una gran inversión en materia de infiltración cultural en los países occidentales. Probablemente, dado los pésimos resultados del modelo, estas operaciones gramscianas pueden haber sido lo más eficiente de la “dictadura del proletariado”, que nunca pudo evolucionar a la etapa de la sociedad sin clases prometida por Marx y Engels.

Claro que, cuando cayó el Muro de Berlín y se desmoronó la Unión Soviética, la realidad quedó ante los ojos del mundo: los trabajadores de los países capitalistas eran mucho más productivos y libres que los colegas socialistas, y el nivel de vida que ofreció la economía de mercado nunca pudo ser emulado por el poliburó. Pero, por si alguien tenía alguna duda, todavía quedaban los “Jurassic Parks” como Cuba o Corea del Norte, que siempre sirven para la comparativa, como también los nuevos intentos del “socialismo del siglo XXI”, que reeditó todas las desgracias de la versión del siglo XX.

Con todo en contra a la hora de discutir en la actualidad, Javier Milei plantea que el fracaso lleva a los socialistas a apelar a toda clase de trampas para imponerse en el debate público, ya que no pueden dar la batalla en el marco de un juego limpio y una discusión que tenga lugar en un “terreno nivelado”.

En uno de los segmentos de la entrevista que Lex Friedman le realizó al mandatario argentino para su podcast, Milei advirtió que muchos de los periodistas ideologizados que hablan de la libertad de expresión, en realidad buscan censurar las voces críticas con la izquierda y el pensamiento woke.

“No pueden soportar la competencia. Si tuvieran que ir a pelear cara a cara por las ideas, en un terreno nivelado, ellos perderían. Porque ellos fueron un fracaso en lo político, en lo económico, en lo social, en lo cultural y no hay que olvidarse que esos asesinos, llamados socialistas, mataron a 150 millones de seres humanos”, advirtió.

Para el presidente argentino, los voceros de la izquierda “no pueden pelear de igual a igual”, por lo que exigen que las redes sociales “tengan censura” para que no se pueda decir la verdad. “Cuando uno les dice la verdad a los socialistas, ellos lloran y dicen que hay discurso de odio. No hay discurso de odio, es que son unos inútiles que han arruinado el planeta”, señaló Milei.

“Quieren censurar las ideas que a ellos no les gustan”, resaltó el mandatario argentino.

En este sentido, sobre el debate de la libertad y las redes sociales, el libertario volvió a ponderar la actitud de Elon Musk al comprar Twitter, convirtiendo en X a uno de los espacios de libertad de expresión más importantes en el marco del debate actual en el mundo.

Fuente: PanamPost